Comunicado de prensa
El Informe Especial 301 de la Oficina de Comercio del Gobierno de EE.UU (USTR) enlista anualmente a los países que han firmado tratados de libre comercio con ese país y que, según su criterio, vienen incumpliendo obligaciones relacionadas con propiedad intelectual. En otras palabras, es una lista negra de países piratas que funciona como una herramienta de presión.
Ya en Informes anteriores, Colombia era enlistada porque se encontraba en mora de cumplir con las obligaciones sobre propiedad intelectual que se desprenden del TLC. En concreto, se hacía un llamado de atención al gobierno colombiano por no haber avanzado en “revivir” la ley Lleras, así como por la persistencia de altos niveles de piratería en Internet y por la existencia de los “San Andresitos”.
El pasado 30 de abril, se publicó la última versión de este informe (analizando el año 2014) y Colombia sigue presente. Nuevamente, se habla de altos índices de piratería en los “San Andresitos” y la piratería en línea, particularmente a través de dispositivos móviles, sitios web y aplicaciones móviles. Sin embargo, no se presentan datos concretos, ni fuentes que respalden estos argumentos.
En esta ocasión el Informe menciona que Colombia debe implementar “los compromisos para hacer frente a los desafíos de la piratería de derechos de autor en la era digital […] en particular a través de dispositivos móviles” y menciona que tanto la Policía Nacional y la Unidad especializada de propiedad intelectual de la Fiscalía General de la Nación deben adelantar “las investigaciones y actuaciones judiciales pertinentes contra los operadores de importantes grandes sitios web piratas y aplicaciones móviles ubicadas en Colombia”.
Cada año, EEUU abre una ronda de comentarios antes de publicar el Informe, en esta oportunidad podemos destacar que el gobierno colombiano, en cabeza del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, resaltó en sus comentarios las acciones que han adelantado para proteger y dar cumplimiento a las normas de propiedad Intelectual. El ministerio mencionó la capacitación a funcionarios públicos y jueces, las campañas anti-piratería a nivel nacional y, los procesos penales que adelantaron en el segundo semestre del 2014, contra infracciones al derecho de autor. La posición del gobierno, se basa en demostrarle a EEUU que es un buen cumplidor de sus compromisos, pero sorprende que, ante una herramienta tan agresiva como el Informe Especial 301, no haya ninguna manifestación sobre la necesidad de cuestionar su naturaleza unilateral y parcial, desde declaraciones soberanas como la que publicó el gobierno chileno este año.
Como lo hicimos en 2011, 2013 y 2014, desde Fundación Karisma presentamos comentarios para ser tenidos en cuenta en la elaboración del informe de abril de 2015. En esta oportunidad, presentamos comentarios junto a IFarma, Misión Salud y el Doctorado en Derecho de la Universidad del Rosario.
Entre nuestras principales denuncias se encuentra que Colombia no está infringiendo ninguna regulación o acuerdo que justifique una reclamación por parte de Estados Unidos y reiteramos que la elaboración unilateral de este Informe se entiende como un mecanismo ilegítimo para presionar a los países a través de una lista de denuncia.
Consideramos que este mecanismo representa una lesión a los intereses comerciales de los países en vía de desarrollo, e invisibiliza los esfuerzos que vienen adelantando para cumplir sus obligaciones internacionales en esta materia, además desconocen que la promoción y garantía de los derechos humanos de la ciudadanía debe primar y protegerse, por encima de cualquier interés comercial.
Como lo mencionamos anteriormente, en otros países de la región, como Chile, las declaraciones de inconformidad no se han hecho esperar. El gobierno chileno emitió una declaración oficial manifestando que el Informe Especial 301 de EE.UU “carece de criterios claros en virtud del cual cataloga a los distintos países, y más bien refleja el interés de la industria norteamericana de aplicar selectivamente sus estándares de propiedad intelectual a otros países”.
Siendo un tema que afecta los derechos de los usuarios de Internet, la ONG Electronic Frontier Foundation (EFF) de EEUU, presentó paralelamente el Informe Especial 404 -lo que no se encuentra en el Informe Especial 301 de EE.UU– que busca darle “un poco de equilibrio a la revisión parcial del USTR sobre las leyes de propiedad intelectual a nivel mundial, poniendo de relieve los argumentos a favor de un equilibrio en temas como el derechos de autor, patentes y derecho de marcas en todo el mundo”.
Por supuesto, Colombia es uno de los países analizados: el Informe Especial 404, señala que frente al sistema de “usos justos” (fair use) con el que cuenta EEUU, nuestro país tiene una lista cerrada de limitaciones y excepciones al derecho de autor, escrita hace más de 20 años y que no se adapta a las necesidades que exige el entorno digital. Además, señala que lo que hace el 301 es pedir el fortalecimiento de un sistema de derecho de autor que ya es lo suficientemente inflexible, tanto que ha llegado a criminalizar y enjuiciar penalmente a investigadores como Diego Gómez, el biólogo colombiano que enfrenta hasta 8 años de prisión por una supuesta violación al derecho de autor.