Por Maritza Sánchez Hernández
Hace una semana Caro Botero y yo pudimos participar en la jornada de lanzamiento del Portal Open Course Ware de la Universidad del Valle [Cali, Colombia]. En la mañana tuvimos la parte más teórica, por así decir, donde Caro [y yo por los laditos] entregó a los participantes nociones básicas y muy ejemplificadas sobre derecho de autor, acceso abierto y alternativas de licenciamiento de obras, diferentes o complementarias al copyright.
Luego en la tarde pasamos a metodologías donde fue la comunidad universitaria, representada por docentes, algunos directivos e investigadores, la que participó de forma enérgica en procesos de reflexión y comprensión de lo que es derecho de autor, acceso abierto y cómo es el funcionamiento, en un sentido más práctico, de la alternativa de licenciamiento de obras a través de Creative Commons.
Jugando, creando, pensando, los asistentes construyeron y compartieron sus propias ideas sobre las posibilidades que la aparición de las nuevas tecnologías de la comunicación y la información suponen a la hora de compartir ideas y conocimientos, cómo y por qué dar un paso más allá de custodiar de forma aserríma la información para, en lugar de ello, pensar en la construcción colaborativa de contenidos, procesos de educación y, por ahí derecho, de evolución.
Esto que con Caro y con la gente de la Universidad del Valle hicimos fue un ensayo. Combinamos la sesión de conferencia con una metodología alemana llamada sorenbergher y un taller-juego de licenciamiento que a mi se me ocurrió y que Carolina me ayudó a pulir, también Carlos Caicedo yMaria Isabel Naranjo [quienes además de la concepción también ayudaron fuertemente en la construcción de los materiales]. ¿Por qué experimentar con esto?.
Lo que vivimos en Cali creo que es justo lo que deseamos hacer desde la Fundación Karisma: hallar caminos y estrategias para llegar a comunidades específicas de forma respetuosa y didáctica, para escuchar sus ideas, sus percepciones y aprovechar sus talentos para que sean ellas mismas quiénes conozcan y adopten las alternativas que en materia de comprensión y organización de su derecho de autor consideren más pertinentes.
El sabor después de esta jornada en la Universidad del Valle es agradable, nos da más energía y nos deja muchas enseñanzas, nos permite conocer el entusiasmos de integrantes de una comunidad universitaria dispuesta a aprender y abrir su mente para fortalecer sus procesos de enseñanza e investigación. Nosotros aprendimos bastante y esperamos, así como vamos, continuar con las ideas locas, experimentando y compartiendo conocimientos, ideas y, aunque suene muy romántica yo, esperanzas.
Aquí imágenes de estar jornada que el pasado 22 de febrero pudimos compartir en Cali!.