El 26 de abril, la OMPI (Organización Mundial de la Propiedad Intelectual) “celebra” el Día Mundial de la Propiedad Intelectual. Desde las organizaciones que promovemos una mirada crítica hacia la propiedad intelectual, hemos convocado durante todos estos años a proponer una agenda alternativa a la convocatoria de la organización; este año no es la excepción, por eso queremos invitarlos este 27 de abril a participar en la discusión usando el hashtag #WorldIPDay en nuestro tweetdebate sobre el impacto de la propiedad intelectual en la vida cotidiana.
Todos tenemos derecho a participar activamente de la vida cultural de nuestro país. Este derecho está reconocido en diversos pactos internacionales e implica que cada ciudadano tiene derecho a gozar de las artes y de los beneficios del progreso científico. Para que la ciudadanía pueda ejercer este derecho, es necesario que las personas puedan acceder y reapropiarse de las obras culturales de múltiples maneras, desde la parodia hasta la copia.
Las leyes de propiedad intelectual y sus normas excesivamente restrictivas afectan negativamente el acceso a la cultura y al conocimiento, tus libertades en Internet, tus derechos sobre los dispositivos que compras e incluso el costo de tus medicamentos, la seguridad de los alimentos que consumes y ponen en riesgo tu libertad de expresión, poniendo el beneficio de las grandes empresas del entretenimiento y la cultura sobre los tuyos.
Muchas veces, los autores son retratados como los principales beneficiarios de los cambios introducidos en las leyes de propiedad intelectual. Sin embargo, sabemos que casi siempre son los menos favorecidos.
Las leyes de propiedad intelectual se negocian en tratados internacionales muy alejados de las políticas locales y poco ayudan a mantener la soberanía de los países: su modificación posterior es casi imposible, debido a las duras sanciones que debe enfrentar algún país que ose mejorar su legislación. Muchas veces, estos tratados comerciales se plantean como opciones que están por encima de los derechos humanos y los regímenes de propiedad intelectual es un ejemplo muy claro de esta situación.
Uno de los primeros tratados de este tipo se llama ADPIC (aspectos de la propiedad intelectual vinculados al comercio), firmado ya hace 20 años. Tras él vinieron muchos otros, que buscan imponer restricciones cada vez más duras al ejercicio de tus libertades. Uno de ellos es el TPP, tratado de libre comercio promovido por Estados Unidos comercio que Perú, México y Chile negocian en secreto junto a otros 9 países.
Si quieres saber cómo es que estos tratados afectan tu vida cotidiana, únete a nuestro Tweetdebate este lunes 27 de abril, en el marco del “Día Mundial de la Propiedad Intelectual”. Nos juntamos bajo el hashtag #WorldIPDay a las 14 hs. Colombia, 16 hs. Argentina, Uruguay y Chile, 15 hs. Paraguay.
El año pasado, en la Fundación Karisma conocimos el caso de Diego gómez Hoyos, quien compartió conocimiento en internet y por esto puede enfrentar hasta 8 años de prisión en Colombia. Desde entonces hemos estado apoyando a Diego con la campaña #CompartirNoEsDelito a la que se sumaron muchos de ustedes! Movilicemonos para que estos casos no sigan sucediendo.
El primer paso para cambiar es demostrar nuestro desacuerdo.
Organizan: Fundación Karisma, Creative Commons Uruguay, Fundación Vía Libre, ONG Derechos Digitales, TEDIC.